Esta última semana ha sido la más increíble que he vivido en lo "profesional" desde que acabé la carrera, allá por 2001, y apostaría a que va a ser muy difícil que vea repetirse algo igual.
En la vida es bueno mantenerse alerta e intentar aprender de cada circunstancia, ya sea agradable o desagradable, y esta semana he aprendido muchas cosas.
... Pero me las guardo. Sólo dejo aquí recuerdo de que esas cosas me han servido para reforzar pilares y certezas: que en la vida se puede llevar la cabeza alta por dos razones, y si no se lleva agachada. Esas dos razones son o que eres un sinvergüenza o que eres bueno, y no te crees mejor de lo que eres. Con la segunda, además sonríes.
Así que... intentaremos seguir con la cabeza alta otros cuarenta años.
No hay comentarios:
Publicar un comentario